Ana Sala decreta que el Grupo Municipal Socialista abandone su despacho
El decreto asigna dependencias municipales a los grupos políticos de la oposición pero los sitúa fuera de zonas de mucho tránsito, casualmente la medida coincide con el incremento de una labor política fiscalizadora
- El PSOE ocupa ese mismo despacho desde el año 2008
- El cambio de ubicación, no consensuado, coincide con la apertura regular y el incremento de actividad fiscalizadora
- El PSOE ya manifestó públicamente su desacuerdo en sede plenaria el pasado 11 de noviembre
La alcaldesa considera adecuado y conveniente al interés público destinar los despachos de la planta baja del ayuntamiento a personal municipal que presta servicios de atención al ciudadano, Padrón y Sanidad para facilitar el acceso de los mismos.
Así por lo menos se manifiesta en el decreto nº 201904699, notificado esta semana al grupo municipal socialista. Un decretazo que pilla por sorpresa al grupo socialista ya que en el último pleno mostró su malestar y desacuerdo por la falta de motivación y conveniencia de la decisión.
Después de leer en prensa elogios sobre el óptimo funcionamiento de la OAC y el alquiler de los más de 100 metros cuadrados de superficie de oficinas colindantes con el Ayuntamiento, la única conclusión que cabe es la que el grupo municipals socialista molesta en los despachos porque está demasiado a la vista del ciudadano. El decretazo de la alcaldesa coincide con el incremento de acciones políticas de fiscalización que parecen incomodar a la primera edil.
El decretazo de desahucio se fundamenta en poco más que una decisión personal de la alcaldesa, no viene precedido de estudio o informe que motive tal decisión. Tampoco los restantes grupos de la oposición han sido citados a negociar el acuerdo, todos se han encontrado la decisión tomada.
Desde el Grupo Municipal Socialista esperamos que reflexione sobre el exceso de autoritarismo irreflexivo de sus decretos, instamos amablemente al diálogo y la negociación. Al contrario que el funcionariado, donde la medida tampoco ha tenido ni negociación previa ni es acogida con demasiado entusiasmo, el Grupo Municipal Socialista sí puede alzar la voz para denunciar la actitud pueril de la alcaldesa que no pretende más que sacar la oposición de una zona de importante tránsito ciudadano.
La falta de plan y la espontaneidad no dialogada hacen que la medida se pueda entender como una mera voluntad política de cerrar el despacho municipal. Desde él los socialistas hace 3 meses que están atendiendo multitud de ciudadanos que no ven satisfechas sus demandas y acuden al principal partido de la oposición para exponer sus casos.
